La penetración no es suficiente

La primera actriz porno venezolana que se dio a conocer internacionalmente, recomienda técnicas para que las parejas sean más felices en la cama

“Hay muchas mujeres que como yo, no quedamos satisfechas nada más con la penetración… Yo no quedo contenta así… También me encanta que me exciten estimulando el clítoris… ¡Qué me trabajen completa!”. Así, con rotunda franqueza y sin huirle a una descarada intromisión en su intimidad, habla Victoria Lanz.
“Lo que más excita al hombre, más allá de lo que yo le haga, es verme excitada… Y mi actitud… ¿Qué si le hago sexo oral para estimularlo? Eso lo hace cualquiera, pero la actitud que se tenga en la cama, es lo determinante”.
Ver y escuchar a la primera pornostar venezolana que conoció el éxito internacional explicar con voz aniñada y ademanes de chica inocente, cómo complacerla entre sábanas, no deja de ser una desafiante paradoja al sentido común.
¿Alguien duda que Victoria Lanz pueda dar recomendaciones a las parejas para que sean más felices en la cama?
Si dudas, sigue leyendo, que a lo mejor esta joven mujer de estremecedoras curvas, labios de éxtasis y ojos expertos, te da un consejo que podría cambiar tu vida sexual.

"Si tu hombre no sirve, búscate a otro"
Victoria Lanz

No más mujeres insatisfechas
-¿Qué crees que deba hacer un hombre para complacer totalmente a una mujer en la cama?
-Los hombres deberían esmerarse por igual en los tres momentos claves del acto sexual: El antes, el durante y el después.

Los ojos se llenan de lujuria pero su tono infantil desconcierta: “En la parte previa es muy importante que nos acaricien, nos besen apasionadamente, eso nos gusta mucho y no que él llegue a meterlo de una vez…”.

En medio de pícaras risas, confiesa que a ella le aburre de sobremanera practicar el sexo en una misma posición, detesta un monótono jadeo porque la deja “mirando hacia el techo”.

Pero la penetración y la variedad de posiciones no son suficientes. Estimular el clítoris es una de las formas más eficaces para llegar al orgasmo. Ella lo sabe y admite que lo disfruta enormemente.

-¿Y después de terminado el acto sexual?
-Después que llegamos al orgasmo no es que viene un “párate para bañarnos e irnos ya”… ¡No! ¿Qué carajo es eso? Deben venir unos besos apasionados, las caricias… mucha ternura. Mis amigas me cuentas de tipos que después que eyaculan les dan la espalda… Es muy raro el hombre que lo haga bien en las tres fases del acto sexual…

-Por eso hay tanta mujer insatisfecha por allí…
-Sí, por eso es que montan cachos, buscando a uno que sí las complazca como es. Para no llegar a eso, el hombre y la mujer deberían hablar mucho, comunicarse, saber qué me gusta y qué no le gusta a él… Ambos deben tratar de complacerse sexualmente.


-¿Si tu pareja no te satisface en la cama, le serías infiel?
-No, yo no montaría cachos, en los cinco años que estuve casada, cuando lo hice con otro hombre, fue por mi trabajo en el cine y mi esposo lo sabía… No soy de montar cachos, prefiero hablar con mi pareja y decirle lo que no me gusta… Si no cambia me paro y me voy… ¡Soy muy impulsiva, me arrecho y ya!

-¿Qué le recomiendas a las mujeres que se sienten frustradas con sus parejas en la cama?
-Si creen que esa es la persona con la que van a pasar el resto de su vida porque lo quieren, deben hablarle claro, decirle “trátame bien, con cariño”, confesar todo lo mal que se sienten y encontrar soluciones… pero si aún así la cosa no funciona, sacúdete de allí mujer, así de simple, búscate a otro que sí te haga feliz.


Comunicación es clave
A Victoria se le precisa sobre lo que ella considera más importante para que una pareja funcione en el acto sexual, y apela a una sola palabra: Comunicación.

Cuando la pareja habla y se compenetra –dice Victoria, usando las delicadas manos como extensión de sus palabras-, trata de compartir fantasías y hacerlas realidad: Por ejemplo, casi todos los hombres siempre sueñan estar con dos mujeres… “Si él me lo pide yo lo complazco, en el sexo todo es válido, por eso no seré lesbiana, aunque disfrute y me excite con las caricias de otra mujer. Además, él no me montará cachos porque está en mi cama conmigo… Si no lo complazco me va engañar el doble, porque se buscaría otras dos mujeres para hacer realidad lo que quiere”.

Richard Sanz / drsexo@diariolavoz.net
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